conforman como signos y espacios gráficos el cuerpo y letra del dibujo.
De lo humano.
Cuerpo presente y cuerpo ausente en concreción abstraída por filtro de autor.
Y abstracción concretada por toma de conciencia post-autor en el sentir vidente.
En la caligrafía de los cuerpos se reabre una arquetípica cuestión:
¿se escribe el dibujo o la escritura se dibuja?…
Y, así, del dibujo de las letras a las escrituras de los cuerpos en una sintáctica del
Dibujo,
Dibujo que ya no es, en definitiva, sólo acerca del cuerpo y su contorno y dintorno, sino Dibujo con el Cuerpo en una Escritura de Acción donde el grafismo se hace rúbrica de compromiso y el Cuerpo Palabra desnuda como nuevo pagano dios.